¿Conoces el callejón de la Inquisición?, ¿sabes qué misterios se ocultan en este pequeño pasaje de la ciudad de Sevilla?
En el artículo de esta semana, os contamos los misterios del Callejón de la Inquisición 👻
Comencemos con una pequeña introducción histórica:
Junto al mercado y fusionado a él, nos encontramos el Castillo de San Jorge. Este solar fue primero una antigua necrópolis almohade, en los siglos XII y XIII.
En el año 1248, Fernando III conquistó la ciudad, y el castillo fue entregado a la Orden de los Caballeros de San Jorge, patrón de los militares. Aquí se instaló una capilla, que fue la primera parroquia cristiana y la única hasta la construcción de la parroquia de Santa Ana (1276).
Este castillo se convirtió en Sede de la Inquisición en 1481. Así pues, fue la segunda sede de la ciudad, y estuvo aquí hasta 1785, cuando se trasladó al antiguo colegio jesuita de las Becas.
El Callejón de la Inquisición tiene 35 metros de largo, y que desemboca en el Paseo de la O. Formaba parte del Castillo de San Jorge, y por él pasaban conducidos los presos que iban a ser juzgados o ya directamente condenados. Durante mucho tiempo, fue el único resto del Castillo de San Jorge, hasta que se descubrieron los muros de la antigua fortificación en 1992.
Ya que estamos hablando de la Inquisición, como curiosidad, la última víctima que hubo en Sevilla fue una mujer ciega. Se llamaba María Dolores López, quien, acusada de fingir revelaciones divinas y de tener relaciones sexuales con sus confesores, fue mandada a la hoguera en 1781.
Tras el abandono del castillo por el Tribunal de la Inquisición, pasó a manos del Ayuntamiento. Este se encargó de su derribo y allanamiento, siendo usado como almacén de grano hasta 1822, cuando fue destinado a Mercado de Abastos.
Los misterios del Callejón de la Inquisición:
Son muchas las personas que aseguran haber visto fantasmas por la zona del Castillo de San Jorge, y concretamente en el Callejón de la Inquisición.
Teniendo en cuenta que es un lugar con tanta historia, y que además fue sede de la Inquisión durante unos 3 siglos, no es de extrañar que sucedan fenómenos extraños en este lugar.
Aquí, muchas personas fueron condenadas a muerte o prisión, así como torturadas: eran quienes la Inquisición consideraba herejes. Se dice que son almas en pena que vagan por el callejón y sus alrededores.
Un relato que se ha repetido entre varios transeúntes de la zona es el de ver la figura de una niña vestida de blanco. Aseguran haberla visto por el mercado, jugar entre los puestos y desaparecer. Incluso hay quienes han escuchado risas de niños a primera hora de la mañana, antes de abrir el mercado.
Por otro lado, en el mismo callejón, un joven vio otra figura misteriosa. Ocurrió cuando volvía a su casa, después del ensayo con la Banda de la Esperanza de Triana. Al cruzar el callejón, una sombra negra se le echó encima, atravesándole y haciéndole perder el conocimiento.
Cuando lo recuperó, pudo comprobar que era la figura de un monje, con sandalias, capucha y sotana. Llevaba también un rosario. Lo más curioso de este suceso fue lo que descubrió este joven, cuando llegó a casa, al buscar información sobre el Callejón de la Inquisición. Encontró la imagen de un grabado del siglo XIX: «la muerte de Torrigiano», en la que identificó perfectamente al monje que había visto en el callejón.
Torrigiano fue un escultor italiano, condenado por la Inquisición y encarcelado en el Castillo de San Jorge, donde murió.
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Muy interesante
Gracias 🙂