En nuestro artículo de esta semana, os vamos a contar la leyenda de la calle Sierpes. ¿La conoces? 😊🐍
La palabra sierpe viene del latín serpens, que significa serpiente.
Existe una leyenda que nos cuenta que, en el siglo XV, los niños en Sevilla desaparecían misteriosamente. Por aquel entonces, al final de la calle Sierpes se encontraba la Cárcel Real (donde estuvo encarcelado Cervantes). Un caballero, llamado Melchor de Quintana, fue detenido por participar en una rebelión contra el comendador. Tras ser juzgado y condenado, fue mandado a esta prisión.
Aquí, en la Cárcer Real, Melchor de Quintana excavó un túnel subterráneo con el fin de escaparse. ¿Y cuál fue su sorpresa cuando estuvo bajo tierra? Pues encontró la causa de la misteriosa desaparición de los niños. Era una enorme serpiente, que capturaba a las pobres criaturas desde las alcantarillas de la ciudad.
Melchor de Quintana mató a la serpiente, y esta fue expuesta en la calle Sierpes por mucho tiempo. Y de esta forma, fue tomando su actual nombre: calle Sierpes.
Todo esto es una leyenda, y existen otras teorías para dar explicación al nombre de esta calle.
Una de ellas nos cuenta que recibió este nombre por la decoración de serpientes de la Cruz de Cerrajería. Hoy en día está en la Plaza de Santa Cruz, pero antiguamente estaba situada aquí en la calle Sierpes.
Otra atribuye este nombre a que aquí vivió un caballero llamado Álvaro Gil de la Sierpe.
También se cree que el nombre puede deberse a que la calle serpentea.
Deseamos que te haya gustado la leyenda de la calle Sierpes 🤗💕
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